Nació en un pequeño pueblo de donde de sus ríos brota el oro. Tierra de barqueros, cacaoteros y madereros. Para llegar a San José de Tadó hay que recorrer más de dos horas en carro por carretera destapada desde Quibdó. De allí llegó Deiver Machado a nuestras Divisiones Menores en 2011, donde se formó como futbolista y hoy tras su pasó por varios clubes colombianos y el fútbol belga, se convierte en el nuevo refuerzo Verdolaga.
Es tímido cuando habla, o por lo menos cuando llega a un lugar nuevo, pero en la cancha no hay quien lo pare. Su zona de juego es la lateral izquierda en la que es firme en defensa y explosivo a la hora de atacar. Debutó con la camiseta verde y blanca en octubre de 2013 contra Boyacá Chicó y en 2014 jugó para Alianza Petrolera.
Tuvo un pasó en el Junior y luego fue una de las figuras de Millonarios en varias temporadas que lo llevaron a ser fichado por el Club Gante de Bélgica. Tras una temporada en el fútbol europeo, regresa a casa y se viste nuevamente de verde.
“Fueron muy lindos los inicios en Nacional porque aquí me tracé la meta de ser jugador profesional y hoy estoy muy feliz de regresar a la casa y reencontrarme con viejos amigos como Felipe Aguilar. Ahora estoy enfocado en ganarme un puesto en el equipo y ganar títulos que ha sido siempre mi objetivo”, dijo el chocoano tras finalizar los exámenes médicos.
El jugador pasó las pruebas físicas y médicas y está listo para iniciar la pretemporada con el equipo en Estados Unidos de cara a lo que será este segundo semestre en el que disputaremos tres torneos. Deiver Machado llega al club Verdolaga por un año con opción de compra.