Nacional fue superior a Junior, lo maniató en su parte ofensiva, lo vulneró en su sector defensivo, superó sus inconvenientes en la portería y se adjudicó sin objeciones una nueva copa en el fútbol profesional colombiano.
Nacional fue superior a Junior, lo maniató en su parte ofensiva, lo vulneró en su sector defensivo, superó sus inconvenientes en la portería y se adjudicó sin objeciones una nueva copa en el fútbol profesional colombiano.
El esquema del profesor Juan Carlos Osorio nunca fue descifrado por los jugadores de Atlético Junior que se vieron superados en todos los sectores del terreno de juego en ambos partidos y perdieron todo tipo de duelos colectivos e individuales que los llevó además a perder la serie.
Con actitud, juego, fútbol vertical y por momentos elaborado, los verdolagas se acercaron a lo que le gusta a la gente y se llevaron para sus vitrinas la primera Superliga de la historia.
