Basado en una fluidez ofensiva propia de otras épocas, en una dupla goleadora a la par de las mejores de su historia (llámese Asprilla-Aristizábal, o Castañeda-Palaveccino, o Lóndero-Santa, o Turrón-Gambina) y en la mística de su entrenador, Nacional le metió 4 goles a América en su casa y sació el gusto de sus aficionados.
Basado en una fluidez ofensiva propia de otras épocas, en una dupla goleadora a la par de las mejores de su historia (llámese Asprilla-Aristizábal, o Castañeda-Palaveccino, o Lóndero-Santa, o Turrón-Gambina) y en la mística de su entrenador, Nacional le metió 4 goles a América en su casa y sació el gusto de sus aficionados.
Generando los mejores comentarios en la prensa deportiva regional y nacional, y dejando la mejor de las sensaciones en sus hinchas, los verdes pretenden el sueño de la Triple Corona y con goles justifican la esperanza del pueblo Verdolaga de alzar las manos tres veces en un año a nivel colombiano.
Poco a poco se esculpe la jerarquía del equipo del profesor Santiago Escobar Saldarriaga y como no nos había tocado observar, meterle 4 tantos a América en Cali comienza a ser ese tipo de banquetes con los que sueñan los aficionados para darse gustos duraderos como aquellos en donde la fruta encima de la torta la ponen las vueltas olímpicas.