Pesa el reloj y no pasa el minutero. Poco a poco se va acercando la fantástica hora en que Atlético Nacional nuevamente estará es una semifinal de la Copa Bridgestone Libertadores de América y la ansiedad crece como una bola de nieve.
Los deseos y los anhelos conjuntos del nacionalismo reunidos todos en estas próximas horas en que a la par de los movimientos del verde en San Pablo, todos estaremos atentos al desenvolvimiento del equipo del profesor Reinaldo Rueda.
Pesa el reloj y no pasa el minutero. Poco a poco se va acercando la fantástica hora en que Atlético Nacional nuevamente estará es una semifinal de la Copa Bridgestone Libertadores de América y la ansiedad crece como una bola de nieve.
Los deseos y los anhelos conjuntos del nacionalismo reunidos todos en estas próximas horas en que a la par de los movimientos del verde en San Pablo, todos estaremos atentos al desenvolvimiento del equipo del profesor Reinaldo Rueda.
La cabeza fría, la sangre caliente, el orden a flor de piel, las ganas potenciadas a la máxima cantidad y la energía dispuesta a ser enviada para buscar de nuevo una final de Libertadores. Vamos Verde carajo.